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SORPRESAS BALEARES Y SOSTENIBLES
Y vi las estrellas...
Se me paso la pena con una copita del excelente vino Cap de Barbaria, desde cuya bodega se ve ese mar que le da sabores y aromas salinos, a esta uva libre de filoxera .
Las anfitrionas del fin de la jornada fueron las estrellas y planetas que Jordy Alemany y Santiago Jiménez, en- cargados del producto Starlight, nos descubrieron a tra- vés de su sabiduría astronómica y de su telescopio. La Vía Láctea, Júpiter, Neptuno, se acercaron a nosotros a través de la lente. Mientras, los astrónomos hablaban con claridad diáfana sobre años luz, la finitud o infinitud del universo y demás temas imposibles de entender, para mi por lo menos, que me iba volviendo cada vez más pequeña, hasta casi desaparecer en ese universo sin fin, e irme a dormir con cierta angustia vital.
De paseo por Vara del Rey.
La navegación de vuelta Formentera - Ibiza, se las trajo. Y cuando digo esto, me refiero a un vaivén del barco, ola va ola viene, nada tranquilizador. La amena charla de Ximena logró sosegarme y los avatares marineros pasaron a la historia al ver el Paseo de Vara del Rey, precioso como nunca. Cerrado al tráfico desde 2017, la arboleda y las imponentes balconadas de las casas presumen sin timidez tras esos años de anonimato a causa de la circulación. Tal es el caso del mítico res- taurante Ca n’ Alfredo, en el centro del bulevar, a cuya puerta está plantado un hombre de pelo blanco. Su pro- pietario, Joan Riera, nos saluda , se sienta con noso- tros, y sigue saludando a todo aquel que pasa por la calle, pues nadie se le escapa y a todos conoce.
Ibiza en invierno, otra Ibiza
Plantación de higueras de Monserrat Pons, Son Mut Nou, en Llucmajor
Ca n ´Alfredo, restaurante ibicenco mítico
Salvar la posidonia en Formentera
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